Chipiona se ha convertido en el epicentro de la defensa medioambiental con la multitudinaria concentración “Salvemos al Río Guadalquivir”, un encuentro que reunió a ciudadanos, colectivos y representantes institucionales de toda la cuenca para exigir una moratoria urgente de las concesiones mineras en Aznalcóllar y Las Cruces. Señalan que la preocupación principal radica en el riesgo de vertidos de metales pesados que podrían dañar gravemente el ecosistema fluvial y las costas de su desembocadura.
Un movimiento ciudadano que crece
Numerosas organizaciones medioambientales, asociaciones agrícolas y culturales, junto a vecinos comprometidos, participaron en la movilización reclamando que se atiendan las advertencias del comité de expertos de las universidades de Sevilla, Cádiz y Granada. Los especialistas alertan que una explotación minera sin las debidas garantías supondría un impacto irreversible para el Guadalquivir y su entorno.
Municipios unidos en defensa del río
Desde el Ayuntamiento de Chipiona, con el alcalde Luis Mario Aparcero al frente, se han puesto las bases de esta reivindicación que cuenta con el apoyo de otros consistorios de Cádiz, Sevilla y Huelva. Localidades como Rota, Sanlúcar, Trebujena, Lebrija, Los Palacios, Gelves, Coria del Río, Puebla del Río, Isla Mayor, Alcalá del Río y Sevilla estuvieron representadas por vecinos, asociaciones y colectivos que se concentraron en la plaza de Las Américas, junto al emblemático Faro de Chipiona.
Actos simbólicos y mensajes claros
La jornada comenzó con una performance reivindicativa, dando paso a las intervenciones de expertos de la Universidad de Sevilla, del grupo ecologista local CANS y de los ayuntamientos de Sanlúcar, Coria del Río y Chipiona. Todos coincidieron en la necesidad de frenar proyectos mineros que amenazan la salud del río y de miles de familias que dependen de sus recursos.
Un cierre cargado de identidad andaluza
Para finalizar, se escuchó el Himno de Andalucía interpretado por Rocío Jurado, un momento cargado de emoción que unió a los asistentes. Como colofón, la Asociación de Agricultores Costa Noroeste de Chipiona ofreció una degustación de sandías y melones, productos locales que simbolizan la importancia de preservar la tierra y el agua que los hacen posibles.
Con esta movilización, Chipiona y toda la comarca lanzan un mensaje claro: el Guadalquivir es vida, historia y futuro, y no puede ponerse en riesgo por intereses económicos a corto plazo.