El tradicional concurso gastronómico de Urta a la Roteña, celebrado este pasado fin de semana en Rota, ha dejado un sabor agridulce para varios de los participantes. A pesar del buen ambiente general y del éxito de público, un grupo importante de cocineros ha manifestado su malestar por lo que consideran una “falta de organización y planificación por parte del Ayuntamiento de Rota”.
Según relatan algunos de los concursantes, los problemas comenzaron al poco de iniciar la prueba, cuando comprobaron que varios de los hornos habilitados por la organización no funcionaban correctamente o directamente no encendían. Sumados a múltiples incidencias con la grifería y otros elementos, las cuales tuvieron que subsanar los técnicos municipales sobre la marcha. A esto se sumó un problema de compatibilidad entre los recipientes que cada cocinero trajo desde casa y los hornos disponibles. “Nos dijeron que podíamos traer nuestras cazuelas, pero resulta que muchas no cabían en los hornos. Nos vimos obligados a salir corriendo a buscar cazuelas nuevas, pidiendo favores en comercios o yendo a nuestras casas. Fue un caos”, explica uno de los afectados.
Un concursante se quedó sin participar
Uno de los momentos más polémicos de la jornada se vivió cuando un participante, ante la imposibilidad de cocinar su urta en los hornos del concurso, pidió permiso para trasladarse a su casa para terminar su receta. La organización le negó esta opción, lo que le obligó a retirarse del concurso. “Le dijeron que si no la cocinaba allí, no podía participar. La urta no cabía en los hornos que había. Es una pena porque llevaba días preparándolo todo”, lamenta.
Buena idea, mala ejecución
A pesar de las críticas, los cocineros coinciden en que el certamen es una buena iniciativa que puede potenciar la cultura y la gastronomía local, pero insisten en que debe estar mejor preparado. “La idea es estupenda, pero no puede organizarse de esta manera. Ha faltado información, medios técnicos y alguien que coordinara de verdad. Así no se puede competir en igualdad de condiciones”, señala otra participante.
El concurso de Urta a la Roteña es uno de los platos fuertes de la programación veraniega en Rota, pero esta edición ha demostrado que aún hay aspectos fundamentales que mejorar para que el evento esté a la altura de su importancia cultural y culinaria.